Las finanzas abiertas se han convertido en un nuevo paradigma para el sistema financiero, no solo transformando la experiencia del cliente, sino también brindando a los expertos en cobranza una importante oportunidad para optimizar estrategias y resultados.

En pocas palabras, las finanzas abiertas se refieren a compartir datos financieros de los clientes entre diferentes instituciones, siempre con su consentimiento. Aunque suena simple, las implicaciones son enormes. Imaginen tener una visión 360° del perfil financiero de cada cliente: ingresos, gastos, deudas… lo que se convierte en una información destacada para personalizar las estrategias de cobranza.

Los consumidores de hoy no quieren sentirse como un número más en una lista de clientes en dificultad. Buscan soluciones financieras que se adapten a su vida, no al revés. Aquí es donde entran en juego las finanzas abiertas. Al entender sus necesidades y comportamientos, podemos ofrecerles planes de pago a su medida y acompañarlos en todo el proceso, desde la prevención de la morosidad hasta la recuperación de la cartera.

¿Recuerdan aquellos días en los que era necesario saltar de un sistema a otro para gestionar la cobranza? ¡Eso ahora es cosa del pasado! Las entidades financieras están creando ecosistemas digitales que integran todo, desde la identificación de clientes hasta la gestión de pagos. En Colombia, ya vemos aplicaciones que combinan servicios como compra de vehículos, seguros y financiamiento. El potencial de la cobranza es alto en este nuevo capítulo del sector.

Desde COLCOB siempre se ha afirmado que la cobranza no se trata solo de recuperar dinero, sino de educar a los clientes para que tomen decisiones financieras responsables. Con las finanzas abiertas, podemos ir más allá de lo básico y enseñarles a evaluar productos personalizados, comparar ofertas y entender los riesgos. Un cliente informado es un cliente que paga a tiempo.

Por supuesto, no todo es color de rosa. La protección de datos y la ciberseguridad son temas críticos que se deben abordar con seriedad. La confianza del cliente es esencial y, para mantenerla, se debe garantizar que sus datos estén seguros y que solo se compartan con su consentimiento explícito.

Sin embargo, si desde el sector de cobranza se hace bien, las recompensas pueden ser enormes: mayor eficiencia, menor riesgo, clientes más satisfechos y, por supuesto, mejores resultados para las empresas.

Es hora de explorar el nuevo mundo de las finanzas abiertas, destacando que es una oportunidad única para reinventar la cobranza y llevarla al siguiente nivel. La evolución está en marcha y es el momento de ser pioneros en la transformación del sector financiero en Colombia. Es hora de aprovechar esta ola de innovación para alcanzar nuevos horizontes y ofrecer un servicio excepcional a los clientes.