NotiCOLCOB

Ley 2439: un nuevo marco para el crédito digital y su impacto en la cobranza
El crédito digital se ha convertido en una de las principales vías de acceso a servicios financieros en Colombia, especialmente para poblaciones que históricamente han estado por fuera del sistema bancario tradicional. Sin embargo, la rápida expansión de las fintech y de las plataformas de crédito en línea planteó vacíos regulatorios y riesgos de cobros indebidos.
Frente a este escenario, la Ley 2439 marca un punto de inflexión: establece reglas claras para el mercado, fortalece la supervisión y brinda seguridad jurídica tanto a consumidores como a entidades.
Transparencia en los cargos
Uno de los cambios más relevantes de la norma es la regulación de los cobros asociados a los créditos digitales. A partir de ahora, solo los costos vinculados a la firma electrónica, identidad digital, autenticación y firmado pueden trasladarse al consumidor. Cualquier otro cargo tecnológico se considera interés, lo que elimina la ambigüedad en las operaciones y evita posibles abusos.
Un proceso 100 % digital
La Ley 2439 organiza el flujo de crédito digital en cinco momentos clave:
- Vinculación del cliente
- Originación
- Emisión de la garantía
- Gestión de cartera
- Cobranza
Todos deben realizarse de manera electrónica, consolidando un proceso completamente digital. Este esquema no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también refuerza la seguridad: la verificación de identidad digital se convierte en un pilar para prevenir fraudes y suplantaciones.
La firma electrónica bajo la lupa
La firma electrónica es otro punto neurálgico de la ley. La norma establece que este cobro debe hacerse una sola vez, al inicio de la vinculación del cliente. No puede repetirse periódicamente ni calcularse como porcentaje del crédito.
Además, se garantiza el derecho de los usuarios a presentar documentos en formato físico en oficinas, lo que asegura la inclusión de quienes prefieren o necesitan usar canales tradicionales.
Retos y oportunidades para las Fintech
Para las Fintech, la Ley 2439 representa un reto de adaptación: ya no podrán monetizarse a través de cobros por el uso de plataformas, sino que deberán enfocarse en la eficiencia operativa y la transparencia. Al mismo tiempo, la regulación ofrece una oportunidad de crecimiento bajo un marco más claro, lo que fortalece la confianza de los consumidores y equilibra la competencia frente a entidades vigiladas por la Superintendencia Financiera y la de Economía Solidaria.
Beneficios para el ecosistema
Entre los principales aportes de la Ley 2439 se destacan:
- Digitalización segura de procesos.
- Reducción de costos operativos.
- Mayor acceso al crédito para poblaciones infraservidas.
- Seguridad jurídica para los pagarés electrónicos firmados con autenticidad verificada.
La norma, además, articula disposiciones de la Ley 1480 (Estatuto del Consumidor) y la Ley 527 de 1999 (firmas electrónicas), consolidando un marco normativo más robusto para las operaciones digitales.
El futuro del crédito digital en Colombia estará determinado por la capacidad del sector para cumplir con la regulación, garantizar transparencia y fortalecer la confianza del consumidor en los medios electrónicos.
Más que una barrera, la Ley 2439 puede convertirse en el punto de partida para un ecosistema más sólido, inclusivo y eficiente, donde el crédito digital deje de ser un terreno incierto y se consolide como una herramienta confiable para millones de colombianos.
Contenido por: COLCOB – ASOACIÓN COLOMBIANA DE LA COBRANZA